Grito despavorido con sabor a Ingreso
Los resultados del examen de admisión en internet opacaban - milagrosamente- la búsqueda de textos como “Angelina Jolie desnuda” (San Google de Los Pollos), “p001aris+hilton000101” (El buen pero totalmente incomprensible buscador Yahoo) y “porn” en el siempre directísimo ares. De ese montón de gente desesperada, uno destacaba... uno con cualidades, inteligencia , firmeza, talla 41 .. y un blog para presumir: sip, la estaba pasando muy mal frente a la sobrecarga de usuarios de la página de Villareal.
Nuevamente darle a el F5 -“actualizar”- y cruzar los dedos para que, esta vez entre.
Aunque no esperaba nada más que una "gracias por participar" más su griterío de yapa, algo me decía que un " Aleluya" coral seguido de un coreografía hindú donde todos son felices para cuando ha terminado la canción, no era tan distante.
Pero Dios no estaba de acuerdo... Trece minutos antes del momento que definiría mi vida (a decir verdad sólo los próximos seis meses; sin embargo no me apetecía la idea de regresar a la academia con una cara de "como decíamos ayer..." y barajándola hasta que alguien tocara el punto del ingreso y me diera una colosal patada en las ingles) trece minutos antes de los resultados nos recordaron de la manera más directa que habíamos olvidado pagar el Internet del mes, trece minutos antes del texto java cifrado más importante de mi vida: adivinen quien dijo bye-bye ??? : poz mi conexión de Internet.
El pánico se apoderó de mi hermana, (quien parecía ser la única dispuesta a tenerme un poco de fe), cuan buena telonera de lo que se venía: mi –muy esperanzada- madre sacaba cuentas sobre cuánto le iba a costar mi próxima pre mientras yo solo atinaba a decir: "mañana vemos los resultados”, ambas me miraban con cara de querer matarme y entonces yo me callaba, ellas volvían la vista al monitor y de nuevo a lo mismo F5, F5, F5, F5, F5… ALT+F4.
Aunque estaba nervioso también estaba cansado... una fila de seis cuadras llena de mocosos paranoicos que entran a dar examen de admisión no es, precisamente, esa clase de cosas que ayudan a mejorar la salud mental, pero dormirse ahora significaría dar pie a que mi madre me tache de irresponsable y despreocupado inmaduro cuando trataba de mantenerme lo más “Sereno” que ese paradisiaco ambiente de dos mujeres más que histéricas dispuestas a hacerme la virgen del sacrificio permitía.
Un cuarto de hora después de relucir mis dotes de orador; me encontraba caminando por mi barrio en busca de un Internet dispuesto a albergar a un desesperado joven en shorts.
Está bien, no era del todo por eso de que iba a estar lleno: simplemente dije todo eso porque tenía flojera de salir de mi casa en una noche fría y YA! ... pero ya estaba fuera del lugar más calentito en el que podía estar, sin embargo la idea de ver a mi madre y mi hermana esperanzadas golpeando la computadora me hacía amar el frío que recorría mis desnudas pantorrillas y seguir silbando la única canción conocida de daniel powter.
¿Por qué había postulado? – hay taaaantos motivos para no estar en casa ... maldita depresión, maldita Post-ulacion.
¿Por qué mierda había lavado toda mi ropa? – Quien lava TODA su ropa el domingo??? por favor baja la mano; ya entendí. El short empezaba a manifestarse en escalofríos en mis piernas y no tenía nada más que resignarme... el lado bueno era que así tuviera ropa limpia y seca, no hubiera podido cambiarme .... espera... ¿ese es el lado "bueno"??
¿Por qué había accedido a salir de mi casa en Altas horas de la noche?
-Tenía taaanto sueño.
¿Cuánto miden la “ALTAS” horas de la noche? – Ni idea, ni gracia... ni siquiera podia contarme un chiste que no sabia a mí mismo...
Sin duda eso no le importaría a mi madre ni a mi hermana.
Aunque no conseguía recordar como dormir en un día normal y no me podía mantener a menos de dos metros de la computadora al lado de la cama, ya no me seducía a la idea de que -tal vez- el Internet había regresado. No perdía nada más que mi posición fetal sobre la cama ... cuando me descubrí a mí mismo frente al mesajito de “Servidor no Encontrado”, sabía que habí perdido el sueño.
Yo me había resignado a comprar el diario con los resultados al día siguiente, pero Giovanni – el tórtolo de mi hermanita- dio su acostuimbrada manifestación vital del día ,vía celular, casi reportándose : provocó a mi hermana a hacerle la mágica pregunta que todos nos imaginamos; pues su “Bebe” - sin tilde - tenía la ventaja de una conexión a Internet que dependía de una empresa conocida, y no de la voluntad de una vieja con negocio de Internet quebrado y un módem.
(algunas veces nos ponemos taaan estúpidos cuando estamos enamorados… ¿ Permitirías q alguien te diga “bebe” si no estuvieras enamorado??... llamarías a las doce de la noche a "saludar"??? .. déjame decirte que si lo haces estás haciendo con una chica que no es tu enamorada, estás siendo demasiado obvio... )
La noticia llegó más rápido de lo que aquel globo con pintura me golpeó a los 12 años, más rápido que el par de golpes en el rostro a los 9, que ese maldito bache que arruinó mi monopatín ( y mi nariz) a los 5, más rápido de lo que se acabó mi desodorante aquella semana que todos en la casa – menos yo- se quedaron sin desodorante y olían a Old Spice pour homme...(para hombre) , más rápido que Vivaldi cayendo desde un quinto piso, más rápido que … (muchas cosas, realmente).
Venía lo peor, y yo no estaba listo: El orgullo familiar caía sobre mis hombros y el adiós a mi melena sobre mi cuello dos días después. Ingresar a la universidad era bueno. Lo malo es que a los 16 no ingresas solo... sino con tu mamá, tu abuela, tu hermana y todos aquellos que estarán ahí para darte un alabo con sabor a crítica. PORQUÉ?? jaja , mira:
- “Que bueno que hayas ingresado hijito; ay! No sabes mi hijito no ingresó a Ingeniería Genética, pobrecito se quedó por una vacante. Imagínate” – La tía lejana LIGERAMENTE celosa.
- “Hay, que bueno que estés en la universidad tan jovencito. Ahora vas a estudiaaar… - La que no te tenía fe.
- “Mira; ingresar es fácil, lo difícil es mantenerte” El primo que ya ingresó.
- “ Dónde está el baño?” – El idiota…osea yo ( a veces no sabes que decir para irte).
Soy villarealino, excepto por todo el papeleo que, afortunadamente, podré hacer solo; ha-ha!!!!!.
Bueno ¿¿¿Ahora que hago??? .. hummmmmm
Si se han dado cuenta; nos preparamos tanto para ingresar a la universidad que olvidamos que allí también se estudia... corrigo : que allí SE ESTUDIA. Osea = melas.
Guardaré mi grito de “VICTORIA !!!!” para cuando tenga un estudio de arte, asesine a Tongo y sea ultra-famoso por mis estupideces, O… para cuando me case con la entonces viuda -por mi obra y gracia- ex“spice girl” que me cambió por un tal Beckham.
Por ahora sólo me queda gritar:
Esparta...! ! ! ! (?)